El dolor de espalda, los hoyos y hasta los rechinidos, pueden ser la mejor señal para que pienses en ir a una tienda y compres un colchón nuevo.
Si usted es como la mayoría de la gente, probablemente no piensa en su colchón hasta que hay un problema – y para entonces, a menudo es demasiado tarde.
Si estás empezando a experimentar dolor de espalda, o si te despiertas sintiéndote rígido y dolorido, podría ser el momento de un nuevo colchón.
Sabemos que el comprar un colchón no siempre es la elección más sencilla, pues son costosos, por ello, se debe de considerar en comprar un colchón y pensar en un nuevo interiorismo para tu habitación podría ser ideal para cambiar de cama.
El colchón se ve caído
Una de las señales más obvias de que es hora de un nuevo colchón es la flacidez visible. Si hay hundimientos o hendiduras notables en la superficie de su colchón, ya no está proporcionando un apoyo uniforme. Esto puede causar dolor de espalda, así como dolor de cuello y hombros.
Huellas corporales
Con el tiempo, su cuerpo dejará impresiones en su colchón. Esta es otra señal de que es hora de un nuevo modelo. Estas impresiones corporales pueden hacer que te hundas en el colchón, lo que puede provocar que se activen puntos de presión y molestias.
Encuentras hoyos
Otra señal de que su colchón ya no proporciona un soporte adecuado es la presencia física de bultos y protuberancias. Estos pueden ser causados por un sistema de espirales desgastado o por un peso corporal excesivo. En cualquier caso, pueden causar dolor e incomodidad si sigue durmiendo sobre ellos.
Alergias
Si eres alérgico a tu colchón, es definitivamente el momento de comprar uno nuevo. Los colchones pueden acumular ácaros del polvo, moho y otros alérgenos con el tiempo. Si te despiertas estornudando o con la nariz moqueando, es hora de deshacerte de tu viejo colchón y encontrar uno que no te haga estornudar.
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